En España el cáncer de mama es la primera causa de mortalidad por cáncer en las mujeres. Este tipo de cancer si se detecta en sus fases iniciales ofrece unas posibilidades de curación de casi del 100%.
El problema es que en las fases precoces no aparecen síntomas, por lo que las revisiones ginecológicas y las pruebas de control, como la mamografía o ecografía, son vitales para su detección precoz.
Cuando la mujer manifiesta síntomas debe acudir lo antes posible al ginecólogo. Aquí te detallamos cuáles son los síntomas más frecuentes que presenta el cáncer de mama, tal y como apunta la Asociación Española contra el cáncer:
- Cambio de tamaño de una o ambas mamas
- Irregularidades en el contorno
- Al levantar los brazos una de las mamas tiene menor movilidad
- Observar alteraciones en la piel de la mama (úlceras, cambios de color, piel de naranja…)
- Alteraciones en el pezón (hundimiento…)
- Aparición de un nódulo o bulto en la axila
- Cansancio
- Dolor óseo localizado
- Dolor en la mama al palparla
¿Cómo actuar ante la presencia de síntomas?
La mujer al detectar alguno de los síntomas anteriormente mencionados debe acudir lo antes posible a su médico para realizar las pruebas oportunas que permitan detectar o descartar la presencia del tumor.
Hay que apuntar, que estos sintomas también pueden aparecer por otras enfermedades benignas por lo que es necesario esperar a los resultados de las pruebas para confirmar el diagnóstico.
¿Cómo se puede detectar a tiempo el cáncer de mama?
Sin duda, la autoexploración de las mamas en casa y las revisiones periódicas con el ginecólogo son claves para detectar a tiempo el cáncer de mama.
Además, es fundamental realizar una mamografía cuando lo indique el especialista. Esta prueba permite detectar anomalías en las mamas hasta 2 años antes de que sean palpables, es decir, que mida 1 cm.
A esto se debe sumar la realización de ejercicio físico, seguir unos hábitos de vida saludables y una dieta equilibrada.
La mamografía y ecografía de mama en el diagnóstico precoz del cáncer de mama
Tanto la mamografía como la ecografía de mama son dos pruebas diagnósticas que se utilizan para detectar precozmente el cáncer de mama. De hecho, los estudios apuntan que realizar exámenes anuales a partir de los 40 años reduce casi en un 40% las muertes por cáncer de mama.
- Mamografía. Es la prueba más conocida por las mujeres. Permite detectar el 98% de los cánceres pequeños en mujeres con mama poco densas y un 48% en las mamas densas. Debe realizarse a partir de los 40 años o antes si tiene antecedentes familiares o personales relacionados con problemas en las mamas.
- Ecografía de mamas. Se realiza a través de ondas de ultrasonido. Es muy eficaz en mujeres con mamas densas porque permite ver la mama desde diferentes planos.
La combinación de ambas pruebas diagnosticas permite detectar eficazmente el 94% de los tumores pequeños.
Unidad de Ginecología del Hospital La Paloma
Los especialistas de la Unidad de Ginecología y Obstetricia del Hospital La Paloma recuerdan que, además de realizar las revisiones periódicas y mamografías o ecografías de mamas, es fundamental que la paciente realice un autoexamen de las mamas en casa. Al menos una vez al mes.
La ventaja es que la propia paciente conoce en detalle su cuerpo y podrá detectar con mayor facilidad anomalías o bultos sospechosos.