Unidad de Pie Diabético
La Neuropatía Diabética o, como se conoce comúnmente, el ‘pie diabético’, es una de las consecuencias que puede acarrear la diabetes. Su incidencia aumenta de forma paralela a la duración y severidad de la hiperglucemia. Se estima que, aproximadamente, el 15% de las personas con diabetes desarrollarán una lesión en el pie a lo largo de su enfermedad y que el 25% de los ingresos hospitalarios de las personas con diabetes se encuentran relacionados con problemas en el pie. Esto hace considerar que el pie de las personas con diabetes sea una diana de las complicaciones de la enfermedad.
Los niveles inadecuados de glucosa en sangre, acompañado por otras complicaciones asociadas a la diabetes, como la hipercolesteremia o la hipertensión arterial, acarrea pérdida de sensibilidad en el pie y problemas de circulación por el daño en nervio y vasos sanguíneos. Esto acarrea la aparición de úlceras que pueden agravarse y en algunos casos, derivar en amputaciones. Estas lesiones suelen surgir en la planta y en cualquier zona del pie, por ello es importante acudir a un servicio sanitario lo antes posible ante la aparición de estas heridas.
Los pies son una zona extremadamente sensible, que debe ser protegida convenientemente dado que su función es esencial. En el Hospital de La Paloma, a través de su Unidad de Pie Diabético, queremos que todos los tejidos de esta zona de la anatomía queden protegidos si se padece diabetes. Es conveniente tener en cuenta que el pie está formado por 28 huesos, 114 ligamentos, 33 articulaciones, 20 músculos, 7.000 terminaciones nerviosas y más de 100 tendones. Todos estos tejidos se encuentran en grave riesgo, si los pacientes no controlan su enfermedad.
Daño en los nervios
La diabetes mal controlada puede generar un importante daño en los nervios. La principal afectación es la denominada desmielinización, que provoca que la funda que recubre los nervios, denominada vaina de mielina, se deteriore y afecte a la corriente nerviosa del interior.
El paciente comenzará a notar pérdida de sensibilidad, entumecimiento, dolor y otros signos similares. Además, este daño también comenzará a provocar pérdidas en las fibras nerviosas.
¿Cuáles son los síntomas más habituales?
La pérdida de sensibilidad es el síntoma más frecuente. Esto provoca que el paciente no perciba los signos más evidentes de que se está desarrollando una lesión y/o infección, como la sensación de calor o el dolor.
Otro de los síntomas es la aparición de una úlcera. Este tipo de lesiones precisa atención especializada, ya que de lo contrario podría extenderse y desembocar en la amputación del miembro afectado.
Además, algunos pacientes perciben sensaciones como calambres y hormigueo. Esto es ocasionado por el mal funcionamiento de los nervios periféricos y el deterioro del sistema circulatorio en esta zona.
Cuando existe dolor
En ocasiones, la neuropatía o pie diabético puede producir dolor, lo que se conoce como dolor neuropático. Es interesante, ya que el paciente siente dolor y, sin embargo, es incapaz de sentir un estímulo doloroso en el pie.
Este tipo de dolor debe ser estudiado desde un punto de vista multidisciplinar, ya que incluso es preciso que sea analizado por neurólogos, para descartar otros orígenes, como el debido a la falta de circulación o a afecciones nerviosas que se encuentran a un nivel mucho más alto, como en la médula espinal.
El tratamiento de la neuropatía dolorosa a veces exige complejos tratamientos y es difícil de tratar. En la Unidad de Pie Diabético disponemos de las herramientas precisas para diagnosticar y tratar este tipo de complicación en conjunto con especialistas de neurología, internistas y Unidad de Dolor.
Consecuencias
La principal consecuencia es, a su vez, el primer síntoma. El paciente comenzará a percibir una falta de sensibilidad en el pie y síntomas como el dolor o las molestias comenzarán a no ser percibidas por el afectado. Esto quiere decir que una persona con neuropatía diabética puede pisar un cristal mientras ande descalzo y no notar absolutamente nada.
Si determinados nervios motores están afectados, el paciente también puede sufrir deformaciones que pueden predisponer al afectado a padecer ciertas lesiones. Además, también puede provocar que la capacidad de sudoración del pie no funcione correctamente, lo que generará un incremento de la sequedad y la piel sea más sensible a generar heridas.
Relación de la neuropatía y la aparición de úlceras
La neuropatía se encuentra implicada en el 80% de las úlceras diabéticas. La incidencia anual de pie diabético se incrementa desde menos del 1% en pacientes sin neuropatía, a más del 7% en pacientes con neuropatía. El mayor problema es que la neuropatía diabética no duele, por lo que es necesario detectarla a tiempo mediante pruebas muy sencillas que realizamos en el Hospital de La Paloma. Una vez diagnosticada, las medidas preventivas tomarán un papel esencial para evitar consecuencias indeseables.
La dificultad que presentan las úlceras
El control de las úlceras y lesiones es un elemento a tener en cuenta. El Hospital de La Paloma posee en su Unidad de Pie Diabético los recursos humanos y tecnológicos precisos para atender estas heridas en todas sus fases. Existen trabajos que demuestran que el mal control metabólico de la diabetes produce un mal funcionamiento de los leucocitos, que son la primera línea de defensa del organismo frente a la infección. Podríamos denominar a estas alteraciones inmunopatía diabética. Existen otras alteraciones a nivel capilar que pueden dificultar el paso de los leucocitos hacia el lugar exacto donde se está produciendo la infección, lo que dificulta su solución.
En caso de que exista una isquemia añadida, tanto los factores de defensa del organismo, como los antibióticos, no van a llegar en la concentración adecuada a la zona de proliferación bacteriana. Al mismo tiempo, existen otros procesos que actualmente están siendo investigados que inciden en la curación de estas úlceras. Lo que sí es cierto es que una vez que se inocula la infección en el pie del diabético, se disemina rápidamente a través de los tendones, afecta rápidamente al hueso y produce necrosis con elevada frecuencia incluso en pacientes sin isquemia.
Tratamiento del Pie Diabético y abordaje de las úlceras
El principal tratamiento en el Pie Diabético es la prevención y el control de la enfermedad. En el Hospital de La Paloma controlamos la evolución de la diabetes con exactitud. Los controles se realizan en base al riesgo del paciente, siendo las revisiones como mínimo de una vez al año, aumentando según los síntomas de los pacientes.
Cuando surgen las úlceras quiere decir que la enfermedad se encuentra sin el control adecuado. Lo primero que realizamos en nuestra Unidad es clasificar e identificar el tipo de úlcera que padece el paciente para proceder a su atención. Las intervenciones para tratarlas se basan fundamentalmente en un recubrimiento adecuado de la lesión, tratamiento de la infección y alivio de la presión.
Las personas con diabetes que han tenido una úlcera previa deben poner cuidado especial en la higiene y cuidado de los pies y en la utilización de un calzado adecuado. El gran reto consiste, además, en prevenir las recurrencias, ya que su tasa en pacientes que han presentado una úlcera es del 66% a los cinco años.
Normalmente desarrollaremos la cura húmeda, que consiste en mantener un medio húmedo en la herida, ya que se ha demostrado ser el medio idóneo para conseguir la cicatrización. Esto se consigue mediante la utilización de distintos tipos de productos y apósitos. De cualquier manera, la úlcera debe ser tratada desde un punto de vista etiopatogénico. Esto quiere decir que si una úlcera es isquémica debe ser valorada por cirugía vascular porque si no se aumenta su aporta sanguíneo no cerrará. En caso de lesiones neuropáticas, si no liberamos de presión la úlcera entonces tampoco cerrará, independientemente de que utilicemos los productos más sofisticados de cura húmeda. La clave de la cicatrización de la úlcera es identificar y tratar su causa.
La descarga en la úlcera es otro de los tratamientos que se deben indicar. Por descarga hay que entender el alivio de las presiones que sufre la úlcera. Las presiones elevadas en un pie insensible son la causa de las úlceras neuropáticas. Si además existe isquemia estaríamos ante una úlcera neuroisquémica, pero la descarga va a ser igual de importante. En la Unidad de Pie Diabético del Hospital de La Paloma recomendaremos el sistema más adecuado según las peculiaridades de cada paciente.
Medidas preventivas
- Los pacientes con neuropatía deben tener presente ciertas rutinas para evitar problemas futuros.
- Usar calzado adecuado, que debe ser adquirido a última hora de la tarde. Esto es debido a que es el momento del día en el que el pie se encuentra más hinchado. De este modo garantizamos que no nos apriete en ningún momento.
- Antes de colocarse el calzado y los calcetines, éstos deben ser revisados a conciencia. Con ello descartaremos cuerpos extraños que puedan causarnos una lesión y que no nos percatemos de ello.
- Cuando vayamos a introducirnos en el agua, comprobaremos previamente la temperatura de la misma para evitar quemaduras.
- Evitar andar descalzo es otra de las recomendaciones, al tiempo que debemos acudir con regularidad al podólogo.
- Mantener una buena hidratación de los pies y evitar el uso de cuchillas en ellos.