El TDAH en la adolescencia tienen grandes consecuencias en el desarrollo del niño, ya que es un momento en el que deben empezar a ser más independientes y tomar decisiones. Además, los estudios han revelado que el 60% de los adolescentes con TDAH repiten curso escolar o, incluso, pueden llegar a ser expulsados del centro.
¿Todos los niños que presentan TDAH lo desarrollan en la adolescencia?
Los estudios realizados demuestran que los síntomas del TDAH se mantienen en un 70% de los niños al llegar a la adolescencia, mientras que el 30% restante pasará a controlar mejor y presentar menor sintomatología típica del TDAH.
En otros casos, observamos que los síntomas se agravan durante esta fase, incluso en niños que no mostraron ningún síntoma en la infancia.
¿Cuáles son los síntomas más frecuentes del TDAH en los adolescentes?
Los indicadores principales son la inatención, la hiperactividad y la impulsividad.
La inatención es la dificultad para mantener la atención durante una clase, una conversación o mientras ven una película. Algunos de los síntomas asociados a este indicador son: Le cuesta continuar lo que ha empezado, pierde cosas, parece que no escucha, tiene dificultades para sostener la atención.
La hiperactividad, al igual que en los pacientes adultos, se manifiesta como un movimiento continuo, una impaciencia o imposibilidad de mantenerse quietos durante un tiempo determinado, “hablar en exceso” también suele ser un síntoma típico.
Finalmente, la impulsividad se observa cuando el paciente interrumpe otras conversaciones, son muy impacientes y se precipitan a dar respuestas sin pensar. En los adultos destacan síntomas como la conducción demasiado rápida, cambio de trabajo de manera impulsiva y sin pensar demasiado las consecuencias.
¿Qué repercusión tiene en su vida?
Los adolescentes con TDAH van a tener un déficit para relacionarse con otras personas, es decir, van a mostrar una falta de empatía o dificultad para comunicarse verbalmente. Esto hace que puedan verse aislados o tienen pocas amistades.
También se ha visto una falta de organización, se olvidan de planes o dificultades para planificar sus tareas.
Por último, los adolescentes con TDAH suelen tener cambios de humor y en muchas ocasiones mayor impulsividad, lo que afecta a su relación familiar, social o escolar.
¿Cómo se puede diagnosticar el TDAH?
Se necesita un diagnóstico multidisciplinar. Por un lado el diagnóstico clínico y por otro lado el diagnóstico psicopedagógico. Los profesionales médicos deben realizar una historia clínica, compuesta principalmente por: anamnesis (mediante entrevistas) y exploración física. Una vez realizada la historia clínica, un psicopedagogo investiga si existen trastornos del aprendizaje y se evalúa el rendimiento académico del niño a lo largo del tiempo. Además, se aplicarán instrumentos como:
– Escalas específicas para el TDAH.
– Escalas de psicopatología general
– Entrevistas estructuradas y semi-estructuradas
– Pruebas de inteligencia y neuropsicológicas
En los últimos años ha habido un grandísimo avance en las técnicas diagnósticas y en el diagnóstico precoz de trastornos cognitivos, como el TDAH. Uno de estos avances ha sido la incorporación de la realidad virtual en el diagnóstico, mediante el sistema Nesplora.
La herramienta Aquarium nos permite simular una situación real y ver cómo reacciona el paciente. Aquarium es una herramienta de evaluación diseñada para evaluar los procesos atencionales y la memoria de trabajo (MT) en adolescentes (de más de 16 años) y adultos.