En apenas unos días inauguraremos la temporada estival. Una época del año en la que debemos prestar una especial atención a nuestra salud, especialmente a determinadas dolencias y problemáticas. El Servicio de Urgencias 24 horas del Hospital La Paloma, en Las Palmas de Gran Canaria, se llena de pacientes que han sufrido accidentes domésticos (cortes, caídas, fracturas…), más frecuentes al disponer de más horas de ocio en familia. También se dan numerosos casos de síncopes, mareos o debilidad a consecuencia de los golpes de calor; erupciones cutáneas y otros problemas en la piel derivados de picaduras de insectos o de rozamientos, dolores de cabeza… Y todo tipo de problemas que con la entrada en el verano se hacen más frecuentes y presentes.
Pero estas dolencias asociadas a las altas temperaturas, al cansancio o a los riesgos mayores de piscinas y playas no son los únicos problemas que encontramos en verano. Esta época, con sus tardes más largas, sus vacaciones y su mayor tiempo de ocio, es escenario para que muchas personas dediquen estas horas libres al deporte.
Una buena decisión siempre que se realice con precauciones. Beber la suficiente agua a fin de mantenernos hidratados y seguir una dieta especialmente rica en verduras y frutas son dos recomendaciones fundamentales para quienes se inician en la práctica deportiva. Aspectos que trabajamos desde nuestra Unidad de Nutrición y Dietética. Pero no se debe practicar deporte de alta intensidad en las horas de mayor exposición solar, especialmente entre las 12 de la mañana y las 16 horas.
Lesiones en los pies
Pese a tomar todas estas precauciones, el aumento de la actividad física también conlleva un aumento de las lesiones asociadas a esta práctica. Los esguinces de tobillo o torceduras se encuentran entre las más comunes. No solo en deportistas; también es frecuente encontrarlas en la población en general debido a que en verano no siempre usamos un calzado adecuado. No se recomienda usar chanclas o ‘cholas’ para todo: es preferible hacer deporte siempre con un zapato adecuado para ello.
Aún con calzado deportivo también pueden darse este tipo de dolencias. Es el caso de la Fascitis plantar, bastante frecuente entre quienes se inician em el ‘running’ o entre los senderistas. Una intensa jornada de turismo urbano en las vacaciones también puede desarrollar esta dolencia, más propensa en las personas de entre 40 y 60 años. Esta afección se manifiesta mediante un dolor agudo en la planta del pie, cerca del talón, debido a que se inflama el tejido fibroso.
Este tipo de deportes, como el atletismo, puede provocar también una metatarsalgia, afección que produce dolor e inflamación en el metatarso. Este tipo de lesiones en el pie a veces se solucionan aplicando frío y descansando, pero en otras ocasiones se hace necesario acudir a un especialista.
Dolor “en el cuerpo”
Algunos pacientes acuden al Hospital La Paloma aquejándose de dolor “en el cuerpo”. A veces son más fáciles de identificar, como el dolor lumbar. Es frecuente en quienes practican deportes como el ciclismo pero también entre quienes cambian la silla de la oficina por tardes de juego en las que levantar niños pequeños. El exceso de movimiento al que no estamos acostumbrado puede provocar esos dolores, pero también lo contrario. Pasar todo un día tumbado al sol de la playa o de la piscina puede derivar en un dolor lumbar, así como en problemas cervicales o de columna. Ese ‘tirón’ jugando o esa lesión por habernos hecho una “maratón” deportiva cuando no estábamos acostumbrados a movernos.
Medicina Física y Rehabilitación
Todas estas lesiones, tan frecuentes en verano, las tratamos desde el Servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital La Paloma. Una unidad que abarca esta especialidad médica en la que se diagnostica y trata una lesión, pero también se atiende a la prevención de las mismas. Nuestro equipo multidisciplinar, integrado entre otras especialidades por fisioterapeutas, te dará las pautas necesarias para una correcta recuperación.
El objetivo es por lo tanto devolver la mayor funcionalidad a la parte del cuerpo lesionada, pero además lograr mitigar los posibles dolores. Por ello, entre los diferentes tratamientos y técnicas que utilizamos, una de las más novedosas es la llamada técnica de ondas de choque.
Ondas de choque
Este tratamiento de ondas de choque aplica ultrasonidos de alta frecuencia mediante impactos electromecánicos o electro hidráulicos de alta energía para eliminar el dolor crónico. Un tratamiento que permite, sin cirugía ni medicamentos, reducir notablemente el dolor de lesiones, especialmente las crónicas. En casos precisamente como la fascitis plantar es altamente beneficioso.
En definitiva, el verano es una época de disfrute pero debemos atender a este tipo de riesgos y tomar ciertas precauciones. Desde el Hospital La Paloma no solo realizamos tratamientos y cuidado a las enfermedades y dolencias de nuestros pacientes, sino que creemos, como ya hemos explicado respecto a nuestra Unidad de Rehabilitación, que es de vital importancia la prevención.