Un alto porcentaje de conductores admite usar el móvil mientras conduce, concretamente un 70%. De estos, casi un 30% asegura que lo hace habitualmente y el restante 40%, que lo usa de forma ocasional. Estas cifras no son nada optimistas, ya que detrás de muchos lesionados de tráfico y, por supuesto, de muchos casos de mortalidad, se oculta el uso del teléfono. Si bien es cierto que en los primeros años en los que el uso de estos aparatos se popularizó sirvieron para salvar muchas vidas al poder alertar a los servicios de emergencias de inmediato, en la actualidad causan más fallecimientos que el efecto contrario.
Estas cifras han sido obtenidas por el Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) en un reciente estudio realizado. En dicha investigación se explica que, al responder una llamada, el conductor retira la mirada de la carretera durante ocho segundos, lo que implica recorrer 111 metros a ciegas si se va a 50 kilómetros por hora (velocidad máxima autorizada dentro de las ciudades); o 264 metros si se va a 120. Una distancia que aumenta si se escribe un mensaje de texto, ya que la distracción dura 20 segundos y supone 278 metros a 50km/h y 660 a 120.
Lesiones cervicales
No es raro observar a conductores que no solo circulan con el móvil pegado a la oreja, conduciendo mientras mantienen una conversación, sino que incluso contestan whatsapps. Esta tarea es incluso más peligrosa, ya que obliga al conductor a desviar la vista de la carretera mientras escribe el mensaje de texto. La Dirección General de Tráfico estima que la primera causa de accidente es el uso del móvil al volante. A nuestra Unidad de Lesionados de Tráfico del Hospital de La Paloma en muchas ocasiones nos llegan pacientes víctimas del uso indebido del teléfono, aunque no siempre se trata de una imprudencia de ellos, sino de un segundo vehículo implicado. Muchas de las lesiones cervicales que atendemos por choques por alcance son consecuencia de ello.
El móvil, detrás del 98% de los accidentes de peatones
Esto también es aplicable a los peatones, dado que se han registrado un incremento de los atropellos e imprudencias por andar mientras se centra la mirada en el teléfono. Tanto es así, que la DGT confirma que el 98% de los accidentes en los que están implicados peatones, el uso del Smartphone es el protagonista.
España es el país europeo donde el Smartphone ha tenido una más amplia penetración, por ello, es imposible pedir a los peatones que no usen este dispositivo mientras andan por la calle, pero si deben guardarlo cuando se dispongan a cruzar por una vía donde circulan vehículos. Evidentemente, los conductores deberían dejar el teléfono en silencio y en un lugar donde no puedan cogerlo durante la conducción, ya que los tonos de mensaje y llamadas, causan una distracción que a veces es imposible de evitar.