El codo de tenista o epicondilitis lateral es muy frecuente, de hecho casi el 3% de la población la sufre, especialmente hombres de más de 40 años.
Aunque su nombre nos pueda desorientar, no es una enfermedad que afecte únicamente a los tenistas, sino que ocurre a cualquier persona que haga un sobreesfuerzo o trabajo excesivo de la musculatura extensora de la muñeca.
De hecho solo tiene relación con deportes de raqueta en el 5% de los casos. Quienes lo sufren con más frecuencia son oficinistas, quienes realizan tareas del hogar, construcción, jardinería, carpintería…
¿Por qué se produce?
Lo que popularmente se conoce como codo de tenista es una inflamación y/o aumento de volumen en la inserción de los músculos extensores de la muñeca, situada en la cara externa del codo. El principal protagonista de esta lesión es el tendón del músculo extensor radial corto del carpo (ERCP).
Los síntomas más frecuentes
Los síntomas más frecuentes son dos:
- Dolor intenso a tocar la parte lateral externa del codo.
- Dolor al realizar movimientos con el brazo, como puede ser agarrar o cargar peso, al cerrar el puño, etc
En cualquier caso, para apoyar el diagnóstico, el especialista puede solicitar una ecografía.
¿Cómo se puede tratar el codo de tenista?
En el 80-90% de los casos el tratamiento es no quirúrgico, es decir, el paciente deberá seguir unas pautas de reposo, toma de antiinflamatorios y realización de terapia física.
En el Hospital La Paloma disponemos de un tratamiento muy eficaz para el tratamiento del codo de tenista: las ondas de choque.
Consiste en aplicar ondas acústicas de presión de alta frecuencia que producen oscilaciones en los tejidos que activan la microcirculacion y el metabolismo.
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