Las lesiones que se producen a consecuencia de un accidente de tráfico dependen de las circunstancias en que éste haya tenido lugar. Sin embargo, existen una serie de lesiones comunes en un alto porcentaje de los accidentes.
La Dirección General de Tráfico destaca entre las lesiones más frecuentes aquellas que afectan al torso, las lesiones cerebrales, las de cuello y cara. También, son habituales las lesiones en extremidades superiores, inferiores, columna vertebral y médula espinal.
Las lesiones cervicales y las fracturas son las más frecuentes
Las lesiones más habituales tras una colisión son aquellas que afectan a la zona cervical, es decir, la zona que mantiene estable la cabeza. El movimiento brusco que se produce durante el accidente hace que la cabeza y el cuello se muevan hacia delante y hacia atrás. A consecuencia de ello se producen esguinces, distensiones o roturas de ligamentos.
Estas lesiones cervicales de origen postraumático también se conocen como ‘el síndrome del latigazo cervical’ y representan el 30% de las lesiones de tráfico. Cada paciente requerirá de un tratamiento concreto y sesiones de rehabilitación, según la gravedad de cada caso.
Por otra parte, las fracturas se producen con regularidad tras una colisión. Éstas pueden ser abiertas, cerradas, con astillamiento del hueso… depende del tipo de accidente y de la gravedad del mismo. Además, los golpes contra el salpicadero y el parabrisas pueden provocar fracturas craneales y faciales.
Normalmente, suelen requerir de una escayola u otro sistema para inmovilizar la zona y conseguir la unión del hueso fracturado. En aquellas fracturas más graves, el paciente necesitará pasar por quirófano para fijar el hueso mediante tornillos, placas, etc. Estas lesiones tardan varios meses en recuperarse y requerirán de periodos de rehabilitación y fisioterapia.
Otras lesiones comunes de accidentes de tráfico
La columna vertebral es una de las áreas más afectadas en un accidente. La zona inferior de la columna sufre de manera notable en una colisión, es por ello que las lumbalgias son frecuentes.
Los traumatismos craneoencefálicos son habituales en accidentes de moto y en atropellos. Estas lesiones se producen tras un fuerte golpe contra el suelo y sus consecuencias dependen del grado del accidente.
Los esguinces o torceduras de cuello junto con las contusiones de rodilla, pérdida de conocimiento, erosiones y contusiones en la región lumbar, son las lesiones que más se repiten en los atropellos.
Finalmente, las lesiones estéticas, es decir, cicatrices, quemaduras… son habituales, ya sea porque se producen en el mismo momento del accidente o a consecuencia de las cirugías que requiere el paciente.
En cualquier caso, tras un accidente de tráfico es imprescindible requerir atención médica, para que los profesionales puedan valorar el estado de las heridas, visibles o no, y controlar su evolución. En caso de sufrir un accidente, el uso del cinturón de seguridad reduce los daños y la gravedad de las lesiones.
En el Hospital La Paloma contamos con una Unidad de Lesionados de Tráfico, referente en el tratamiento de lesionados en accidentes de tráfico. Si necesitas más información no dudes en contactar con nosotros.