Riesgo cardiovascular
Estas enfermedades constituyen la primera causa de muerte del mundo, provocando el 40 por ciento de todas las defunciones.
Entre las enfermedades isquémicas del corazón, el infarto agudo de miocardio es la más frecuente con un 61 por ciento de las muertes. Si bien esta patología en sujetos de 25 a 74 años se mantiene estable, se estima que cada año aumentará un 1,5 por ciento el número de casos de infarto y angina de pecho debido al envejecimiento de la población.
La enfermedad cerebrovascular es más habitual que aparezca en la población de edad avanzada. Las consecuencias pueden tener diferentes síntomas y gravedad e incluir desde problemas de visión, hasta dificultad para coordinar los movimientos. Esta patología es una de las principales causas de invalidez grave y prolongada en los adultos.
Por todo esto, la prevención y atención temprana resulta imprescindible para prevenir las enfermedades cardiovasculares. Los profesionales de la Unidad de Medicina Interna del Hospital La Paloma están especializados en el estudio de los Factores del Riesgo y tienen como misión principal el control de los factores de riesgo cardiovascular modificables, para así disminuir el riesgo de eventos cardiovasculares, tales como el ictus, el infarto agudo de miocardio, la afectación renal y ocular, así como la disfunción eréctil.
La valoración de los factores de riesgo cardiovascular está indicada para toda la población, en especial para los que presenten antecedentes familiares, factores de riesgo ya conocidos, eventos cardiovasculares previos, hábitos de vida poco saludable y para las mujeres que ya han superado la menopausia.
¿Qué es el riesgo cardiovascular?
Las patologías cardiovasculares son aquellas que afectan al corazón y al sistema circulatorio. Entre ellas se encuentran los problemas cerebrovasculares, que pueden derivar en ictus. El riesgo cardiovascular mide las posibilidades que tiene un paciente en desarrollar una patología de este tipo, atendiendo a sus factores de riesgo. La enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte en el mundo occidental, por delante incluso del cáncer y de otras enfermedades degenerativas.
¿Qué lo provoca?
Normalmente la enfermedad cardiovascular surge tras un proceso denominado ‘ateroesclerosis’, una enfermedad que provoca el endurecimiento y rigidez de los vasos sanguíneos. Este proceso lo acelera hábitos como el tabaco, una dieta alta en grasas y azúcares, el sedentarismo o la hipertensión, entre otros.
Factores de riesgo cardiovascular
Los factores de riesgo son aquellos que incrementan la posibilidad de sufrir un accidente vascular.
- Tabaco: el tabaquismo está estrechamente relacionado con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Puede generar arritmias, hipertensión, taquicardia o aterosclerosis, entre otras consecuencias.
- Hipercolesteremia: el exceso de colesterol se adhiere a las paredes de las arterias, provocando dificultad en la circulación sanguínea.
- Sedentarismo: la falta de actividad física es un factor de riesgo importante.
- El estrés: se ha comprobado que, tras una elevada tensión emocional, el riesgo de sufrir un infarto se duplica durante las dos horas inmediatamente posteriores.
- Alimentación desequilibrada.
- Consumo de alcohol.
- Edad y genética: esto son factores de riesgo no modificables.
- Género: ser hombre también incrementa el riesgo cardiovascular.
- Diabetes: esta patología incrementa la posibilidad de desarrollar una enfermedad vascular, por lo que su control es esencial.
- Sobrepeso y obesidad.
Diagnóstico de los factores de riesgo cardiovascular
Hay pacientes con mayor riesgo de sufrir una afección cardiaca. Por esa razón, los especialistas de la Unidad valorarán el riesgo cardiovascular en personas que tienen más de 40 años y presentan alguno o varios de los factores de riesgo cardiovascular.
En el diagnóstico deberá incluir la medición y el registro de los siguientes datos clínicos:
- Historial familiar de enfermedades cardiovasculares.
- Edad.
- Género.
- Etnia.
- Consumo de tabaco.
- Perfil lipídico en ayunas.
- Glucemia en ayunas.
- Índice de masa corporal.
- Perímetro abdominal.
- Si la persona tiene diabetes deberá anotar la fecha de diagnóstico y determinar la hemoglobina glucosilada, la presencia de albuminuria y la creatinina sérica.
Tratamiento de los factores de riesgo cardiovasculares
Dependiendo del riesgo de enfermedad cardiovascular que haya, se realizará un tratamiento u otro, pero se pueden establecer unas condiciones generales:
- Mejorar los hábitos de dieta.
- Incrementar la actividad física.
- Medidas generales contra el sobrepeso y la obesidad.
- Evitar el tabaco y el consumo de alcohol.
La presencia de hipertensión o de alguna patología coronaria previa, podría precisar de la prescripción de fármacos para su control.
Los especialistas de Unidad la de Factores de Riesgo Cardiovascular se han formado en los últimos avances médicos. Todos aquellos estudios e investigaciones que se presentan anualmente en Congresos y se publican en las revistas científicas más punteras. Muchos síntomas como dolores, palpitaciones, dificultad respiratoria o mareos, pueden tener su origen en patologías vasculares. Los internistas del Hospital de La Paloma están especializados en la atención a pacientes complejos, por lo que cuentan con la experiencia precisa para encontrar con el desencadenante de dichos signos.