En el embarazo el cuerpo se enfrenta a muchos cambios. Por lo que después del parto es importante que la madre realice las revisiones médicas para comprobar su estado general de salud.
Una de las revisiones más importantes que debe realizar es la revisión ginecológica para comprobar que no hay secuelas físicas ni psicológicas para que afronte su nueva etapa.
Cuándo se debe acudir al ginecólogo tras el parto
Por lo general, se recomienda que aquellas mujeres que han tenido un parto vaginal realizan su primera revisión ginecológica a partir de los 50-60 días tras dar a luz.
En el caso las mujeres a las que han hecho una cesárea, la revisión debe adelantarse a la semana posterior al nacimiento para hacer un seguimiento de la cicatriz, es decir, debe acudir entre los 7 y 14 días siguientes.
Molestias tras el parto que requieren una consulta urgente con el ginecólogo
Tras el parto es normal que la madre tenga molestias. Las más comunes suelen ser dolor en las mamas, picor o tirantez por los puntos de la episiotomía y pesadez de piernas.
Sin embargo, cuando la madre presente alguna de estas molestias por un largo tiempo o alguno de estos otros síntomas debe acudir inmediatamente al especialista:
- Fiebre superior a los 38º
- Pérdidas sanguíneas que desprenden mal olor (loquios)
- La herida de la cesárea está muy roja y caliente
- Hinchazón de pies y manos de repente
- Cuando aparecen grietas en los pezones o bultos en las axilas
¿Para qué se realiza esta revisión?
En la primera revisión ginecológica tras el parto se analizan y evalúan lo siguiente:
- Examinar el periné, las cicatrices y hemorroides que hayan podido aparecer tras dar a luz
- Revisión y exploración de las mamas
- Comprobar si se ha restablecido la función menstrual con normalidad
- Se comprueba que el útero se haya contraído, su tamaño y posición mediante la palpación del abdomen y un tacto vaginal
- Comprobar el estado anímico de la mujer, ya que un 15% presentan depresión post parto
- Evaluar la situación del suelo pélvico teniendo en cuenta la continencia urinaria y fecal
En ocasiones podrá ser necesario solicitar un análisis de sangre completo o un hemograma que permitan descartar posibles anemias en la madre. También son importantes los análisis de orina para comprobar si hay infecciones en el aparato urinario. Los ginecólogos recomiendan repetir estas pruebas al finalizar la lactancia.
Además, es un momento perfecto para que la madre exponga sus dudas al ginecólogo sobre la lactancia, los métodos anticonceptivos, la planificación familiar, el reinicio de las relaciones sexuales…
La citología tras el parto
La citología se realiza para obtener una muestra de las células del cuello uterino. Una vez se ha dado a luz se debe esperar el puerperio antes de realizar esta prueba, es decir, unas ocho semanas.
De todas formas, el ginecólogo según el caso de cada paciente determina cuándo deberá realizarse, ya que si han habido complicaciones tras el parto quizás será necesario esperar más tiempo. Si quieres saber más sobre la citología entra aquí